Alergias alimentarias en niños: síntomas, diagnóstico y alimentos más problemáticos

¿Qué es una alergia alimentaria?

Una alergia alimentaria ocurre cuando el sistema inmunitario del niño interpreta incorrectamente que una proteína presente en un alimento es peligrosa, incluso siendo inofensiva. En respuesta, el cuerpo produce anticuerpos (inmunoglobulina E o IgE) y libera sustancias químicas como la histamina, lo que desencadena síntomas alérgicos que pueden variar de leves a graves o potencialmente mortales.​

Es crucial distinguir entre una alergia alimentaria, una intolerancia y una sensibilidad. Una alergia siempre implica al sistema inmunitario, mientras que una intolerancia alimentaria (como la intolerancia a la lactosa) afecta solo la capacidad del cuerpo de digerir un alimento, causando principalmente síntomas digestivos. Las sensibilidades alimentarias son reacciones más leves sin participación inmunológica clara.​

Síntomas de alergia alimentaria

Los síntomas pueden aparecer inmediatamente después de consumir el alimento o dentro de algunas horas. Es importante saber que cada niño puede presentar síntomas diferentes.​

Síntomas leves a moderados:

  • En la boca y garganta: hormigueo, picor intenso en la boca y paladar, opresión en la garganta, ronquera o afonía
  • En la piel: urticaria (ronchas y habones), sarpullidos con picazón, eccema, hinchazón de labios, cara, lengua o garganta
  • Síntomas respiratorios: estornudos, congestión nasal, goteo nasal, sibilancias (sonido de «pitos» al respirar), tos, dificultad para respirar
  • Síntomas digestivos: náuseas, vómitos, dolor abdominal, calambres abdominales, diarrea, dificultad para tragar

Síntomas en bebés pequeños:

Los bebés menores de 1 año pueden mostrar signos diferentes que los niños mayores:

  • Frotarse repetidamente los ojos
  • Sacar la lengua repetidamente
  • Llanto excesivo o anormal
  • Arqueamiento de la espalda
  • Disminución del tono muscular
  • Problemas de alimentación
  • Aumento de peso insuficiente
  • Vómitos persistentes

Síntomas circulatorios graves:

  • Palidez de la piel
  • Aturdimiento o mareos
  • Dolor en el pecho
  • Sensación de desmayo o confusión
  • Pérdida del conocimiento

Anafilaxia: la reacción más grave

La anafilaxia es una emergencia médica potencialmente mortal que requiere atención inmediata. Se trata de una reacción alérgica rápida y grave en la que ocurren múltiples síntomas simultáneamente, afectando la piel, la respiración, la digestión, el corazón y los vasos sanguíneos.​

Síntomas de anafilaxia:

  • Sensación de opresión en la garganta
  • Dificultad para respirar, tragar o hablar
  • Hinchazón de labios, lengua, boca o garganta
  • Manchas en la piel, urticaria o picor
  • Dolor abdominal, náuseas, vómitos
  • Debilidad general y mareos
  • Taquicardia (sensación de que el corazón va muy rápido)
  • Ansiedad
  • Posible pérdida de conocimiento

Es crucial saber que una reacción alérgica leve anterior NO garantiza que la próxima sea leve. Incluso una cantidad microscópica de alimento puede desencadenar anafilaxia en personas sensibles. Si sospecha anafilaxia, llame al 911 inmediatamente.​

Alimentos más alergénicos

Aunque más de 170 alimentos pueden causar reacciones alérgicas, la mayoría ocurre por los llamados «Nueve Grandes» alérgenos:

AlérgenoDescripción
Leche de vacaUna de las alergias más comunes en la infancia. Las proteínas de la leche pueden causar reacciones de leves a graves​
HuevosEspecialmente la clara contiene proteínas altamente alergénicas (ovomucoide, ovoalbúmina)​
Cacahuetes (maní)Causa reacciones frecuentemente graves. Los cacahuetes son legumbres, no frutos secos​
Frutos secos de árbolNueces, pistachos, pacanas, anacardos. Pueden causar reacciones graves​
PescadosAtún, salmón, bacalao y otros. La alergia puede durar toda la vida​
Crustáceos y mariscosCamarones, langosta y otros. Frecuentemente causa reacciones graves​
TrigoCausa alergia por sus proteínas, diferente de la enfermedad celíaca​
SojaMás común en bebés y niños pequeños; muchos la superan con la edad​
SésamoAlergia cada vez más reconocida como causa de reacciones graves​

Los cacahuetes, frutos secos, leche y sésamo producen con mayor frecuencia reacciones anafiláxicas graves.​

Alimentos que pueden contener alérgenos ocultos

Es importante revisar las etiquetas, ya que muchos alimentos procesados contienen alérgenos no evidentes:​

  • Derivados de la leche: suero, caseína, caseinatos, lactosa, leche en polvo, ghee, margarina
  • Productos que contienen huevo: productos de panadería, cereales de desayuno, mayonesa
  • Alimentos que pueden contener cacahuetes o frutos secos: chocolates, caramelos, aderezos para ensaladas, salsas
  • Pescado y mariscos: pueden estar presentes en salsas de soja, Worcestershire o en alimentos que no los mencionan directamente

Diagnóstico de alergia alimentaria

No existe una única prueba definitiva para confirmar una alergia alimentaria. El diagnóstico requiere una evaluación integral.​

Evaluación clínica inicial:

Su pediatra o alergólogo revisará detenidamente:​

  • Los síntomas específicos del niño (qué alimentos y en qué cantidades parecen causar problemas)
  • Antecedentes familiares de alergias (padres, hermanos)
  • Timing de los síntomas (inmediatos o retrasados)
  • Si la reacción ocurre consistentemente con el mismo alimento
  • Si el alimento estaba cocido o crudo
  • Cómo se preparó el alimento

Pruebas diagnósticas:

Prueba cutánea (Prick Test):

El alergólogo coloca una pequeña cantidad de extracto del alimento sospechoso en la piel del antebrazo o la espalda del niño, luego realiza un pequeño pinchazo o rasguño. Después de 15-20 minutos, observa si aparece una protuberancia roja e hinchada (roncha). El alergólogo mide el tamaño de la reacción con una regla.​

  • Ventajas: Rápida, económica, puede probar varios alimentos simultáneamente
  • Limitaciones: Una prueba positiva no confirma automáticamente alergia; requiere correlación clínica​

Análisis de sangre (Prueba IgE):

Se extrae una muestra de sangre que se envía al laboratorio para medir los anticuerpos IgE específicos contra alimentos sospechosos.​

  • Ventajas: No causa reacciones cutáneas, útil si el niño tiene dermatitis extensa
  • Limitaciones: Similar a la prueba cutánea, un resultado positivo no confirma automáticamente alergia

Prueba de provocación oral:

Esta es la prueba más definitiva pero requiere precaución especial. Se realiza en el consultorio médico o hospital bajo supervisión. Se administran cantidades progresivamente mayores del alimento sospechoso mientras el médico observa atentamente cualquier síntoma.​

  • Ventajas: Proporciona confirmación definitiva
  • Limitaciones: Puede desencadenar anafilaxia, por lo que debe hacerse solo en entorno médico adecuado

Interpretación de resultados:

Es crucial recordar que una prueba positiva (cutánea o de sangre) por sí sola no diagnostica alergia. El médico debe analizar los resultados junto con el historial clínico del niño. Algunos niños pueden tener pruebas positivas sin verdadera alergia (sensibilidad sin síntomas), mientras que otros pueden tener reacciones clínicas sin pruebas positivas.​

Manejo de la alergia alimentaria

Evitar el alimento problemático:

El tratamiento principal es la evitación estricta del alimento alergénico. Para niños con riesgo de anafilaxia, esto significa evitar incluso trazas microscópicas del alimento.​

Epinefrina para reacciones graves:

Si su hijo tiene riesgo de anafilaxia, el alergólogo le prescribirá autoinyectores de epinefrina (adrenalina). Estos son dispositivos que administran una dosis fija del medicamento.​

Dosis de epinefrina según peso:

  • 0.15 mg (150 microgramos): Para niños que pesan hasta 25 kg aproximadamente
  • 0.30 mg (300 microgramos): Para niños que pesan más de 25 kg y adultos
  • 0.50 mg: Disponible en algunos casos según indicación médica

Cómo usar un autoinyector de epinefrina:

  1. Retire el autoinyector del estuche y sosténgalo con su mano dominante (la que usa para escribir), con la tapa de seguridad de color (azul, verde, roja, según el modelo) apuntando hacia arriba
  2. Retire la tapa de seguridad con su otra mano. La aguja sale por el extremo opuesto
  3. Coloque el extremo negro/naranja/rojo del autoinyector en la parte externa y musculosa del muslo del niño, aproximadamente a la mitad de la distancia entre la cadera y la rodilla. Puede inyectar a través de la ropa
  4. Presione firmemente con un ángulo de 90 grados hasta escuchar un clic
  5. Mantenga presionado durante 3-10 segundos (según el modelo)
  6. Retire en línea recta – la aguja se retraerá automáticamente
  7. Masajee el área durante 10 segundos aproximadamente

Puntos críticos sobre el autoinyector:

  • Si el niño no mejora en 5-15 minutos, puede administrar una segunda dosis con otro autoinyector
  • El niño debe llevar siempre dos autoinyectores consigo
  • Llame al 911 inmediatamente después de usar epinefrina
  • El niño debe recibir evaluación médica incluso si parece recuperarse
  • Verifique la fecha de caducidad regularmente y reemplace autoinyectores vencidos
  • Enseñe a maestros, cuidadores y al propio niño cómo usarlos

Introducción temprana de alimentos alergénicos

Investigaciones recientes han demostrado que la introducción temprana de alimentos alergénicos puede ayudar a prevenir alergias alimentarias, en lugar de retrasarla.​

Recomendaciones actuales:

  • Lactancia materna exclusiva durante los primeros 4-6 meses (no se ha demostrado que restringir la dieta materna previene alergias)
  • A partir de los 4-6 meses, comience con alimentos complementarios de un solo ingrediente (frutas, verduras, cereales)
  • Alrededor de los 6 meses (no antes de 4 meses), introduzca gradualmente alimentos que contienen alérgenos comunes como huevo, lácteos, cacahuete, frutos secos, sésamo, pescado y mariscos
  • Introduzca un nuevo alimento a la vez con al menos 2-3 días entre cada uno para identificar reacciones
  • Ofrezca los alimentos en formas seguras que no causen asfixia (purés, papillas finas)
  • Sea consistente: ofrezca alimentos alergénicos regularmente, no esporádicamente

Esta introducción temprana y regular parece reducir el riesgo de desarrollar alergias alimentarias en niños con predisposición.​

Cuándo buscar ayuda médica

Llame al pediatra si:

  • Sospecha que su hijo tiene alergia alimentaria después de observar síntomas consistentes
  • El niño rechaza consistentemente ciertos alimentos tras reacciones repetidas
  • Hay antecedentes familiares fuertes de alergias
  • El niño tiene síntomas digestivos crónicos o eccema que podría estar relacionado con alimentos

Busque atención de emergencia (911) si:

  • Dificultad para respirar o sibilancias
  • Hinchazón de labios, boca, lengua o garganta
  • Imposibilidad de tragar
  • Mareos, aturdimiento o pérdida de conocimiento
  • Dolor abdominal severo o vómitos profusos
  • Cualquier signo de anafilaxia

Impacto emocional y social

Las alergias alimentarias graves pueden afectar significativamente la calidad de vida del niño y la familia. Es importante:​

  • Trabajar con el alergólogo para crear un plan de manejo individualizado
  • Educar a maestros, cuidadores y compañeros sobre la alergia del niño
  • Enseñar al niño (según su edad) sobre su alergia y cómo comunicarla
  • Mantener un sistema de apoyo emocional, ya que el estrés relacionado con las alergias es común

Las alergias alimentarias en niños requieren diagnóstico profesional que combine pruebas con evaluación clínica. Los «Nueve Grandes» alérgenos (leche, huevo, cacahuete, frutos secos, pescado, mariscos, trigo, soja, sésamo) causan la mayoría de las reacciones. Aunque algunas alergias se superan naturalmente durante la infancia, otras persisten de por vida.

La evitación estricta del alergénico es el tratamiento principal, junto con llevar siempre epinefrina para quienes tienen riesgo de reacciones graves. La investigación actual sugiere que introducir alimentos alergénicos tempranamente (alrededor de los 6 meses) puede ayudar a prevenir el desarrollo de alergias. Con un plan de manejo adecuado, educación y vigilancia, la mayoría de los niños con alergias alimentarias pueden vivir vidas normales y saludables.